Al fin han dado comienzo las primeras prácticas de la carrera, no sabía cuando iba a llegar este momento. Como bien pone en el título de la entrada, hoy los nervios han estado a flor de piel, pero, más que nervios, ha sido una mezcla de sensaciones, curiosidad, ilusión, ganas. Mi compañera Vanessa y yo, ya que hemos coincidido en el mismo centro escolar, hemos llegado juntas a éste. Nos ha recibido Emma, la jefa de estudios del centro, con los brazos abiertos, al igual que los demás maestros con los que hemos cruzado un "¡Buenos días!". Estaban todos al tanto de nuestra llegada.
Primero nos ha explicado cómo iba a ser el funcionamiento de nuestra semana de rotación por los distintos niveles educativos y nos ha dado a cada una un horario. Después nos ha enseñado el centro escolar y la ubicación de cada clase, dirección, sala de profesores, aula de la PT, biblioteca y los patios de recreo.
Una vez terminada esta visita, me he dirigido al curso que me habían asignado ese día: 1º Primaria. En este nivel he estado las tres primeras sesiones: Valores sociales y cívicos (los alumnos han hablado sobre las necesidades de las personas y han entendido lo afortunados que son por tener lo que necesita una persona para poder vivir), Lengua (los alumnos me han contado la historia de "Letrilandia", un recurso por el cual están aprendiendo el abecedario) y Educación Física (han trabajado la lateralidad mediante juegos individuales y grupales).
Las dos sesiones posteriores al recreo, he estado en 2º Primaria. Primero he estado en Lengua, en la cual hemos hecho un dictado, hemos corregido las faltas de ortografía y hemos hecho actividades en voz alta. A última hora he estado en Religión, en la que primero han rezado y después hemos hablado sobre el tema de la creación.
En las aulas en las que he estado hay PDI, aunque no han sido utilizadas, ya que siguen una metodología tradicional y sobre todo, con los más pequeños, las sesiones consisten en dialogar.
El primer día he salido del colegio con muy buenas sensaciones. Me ha dado mucha impresión el hecho de haber estado frente a una clase en el papel de maestra y no de observadora (ya que en la clase de Lengua de 2º Primaria, la tutora me ha permitido dar la clase).
Pienso que lo importante de esta profesión se aprende con la experiencia, aunque siempre hay que tener una base, claro está. Los maestros han sido muy acogedores, estando pendientes en todo momento de mí, y los niños estaban muy ilusionados,los cuales cogen cariño muy pronto.
Una de las cosas que me ha facilitado la incorporación al centro ha sido el hecho de haber pasado mi etapa escolar en este centro, por lo que la ilusión aumenta con la idea de trabajar mano a mano con los que fueron mis maestros.
Por último, creo que no me he equivocado en la elección de mi futura profesión, ya que una de las cosas que influyó en mi elección fue imaginarme la satisfacción con la que he salido hoy del colegio. Creo que esta etapa va a marcar un antes y un después, y por supuesto, voy a aprender muchísimo, sobre todo de los niños.
¡CON LAS PILAS CARGADAS PARA EL SIGUEINTE DÍA!